Visitar Barcelona en 4 dias.

Cómo conocer Barcelona en 4 días

Barcelona, una ciudad con 1.621.537 habitantes y 101,4 km2 de extensión. Parece complicado conocer la segunda ciudad más importante de España en cuatro días, pero en la práctica puedes descubrir que sí es posible. ¿Qué es necesario? Un buen mapa de la ciudad y del metro (el mejor medio de transporte para moverse por la ciudad), dos buenas piernas con ganas de andar y unas nociones previas de lo que se puede ver. A continuación, os haré una pequeña descripción de nuestro viaje, para que veáis cómo es posible.

Día 1:

Es fundamental buscar un vuelo barato, aunque si es con Ryanair (rainiero para los amigos) te llevan a Reus. Hay que tener en cuenta que el viaje de Reus a Barcelona en autobús, es de una hora y media aproximadamente y cuesta unos 20 euros, ida y vuelta (se coge en el mismo aeropuerto). Lo bueno de estos vuelos es que probablemente llegues a las 9 de la mañana, con lo que puedes aprovechar bien el día.

Lo principal es buscar el hotel… algo que te puede llevar varias horas. Una vez soltadas las maletas hay que recargar pilas y comenzar la visita, para no perder un minuto. Se puede empezar por lo más fácil: el centro. La Rambla no es un lugar tan tenebroso como lo pintan, aunque haya personas pidiendo u ofreciendo… sustancias. Si tienes precaución, puedes pasear tranquilamente y ver lo curioso de sus puestos. Es un lugar que cuenta con mucho ambiente y está muy bien localizado, ya que al final de la Rambla encontrarás el puerto de Barcelona. Tres puntos básicos hay que ver aquí, si buscas pasear: El centro comercial Maremagnun, el monumento a Colón (al que puedes subir por 3 euros, aunque no se sabe hacia dónde señala Colón) y el puerto en sí mismo, que tiene una vista bonita y un paseo apropiado para sentarse a descansar si no hace mucho frío.

A la hora de comer, no lo dudes, sino te han recomendado un sitio previamente, no te arriesgues, todo es carísimo. Lo más seguro es ir a un Burger King, McDonalds y similares, o directamente ir a Carrefour Express (en mitad de La Rambla) y comprar provisiones.

También puedes ver, al otro lado de la Rambla, la plaza de Cataluña, aunque no es gran cosa y parece más bonita de día. ¡Haz la comparación!

De noche puedes adentrarte en el centro y descubrir la Catedral gótica de la Santa Cruz y Santa Eulalia (pla Seu), el parlamento, el ayuntamiento, entre otros, o perderte un poco por la zona, ya que es mejor guardarse el resto para el día siguiente.

Día 2:

La ruta Gaudí es indispensable para conocer el modernismo que caracteriza a la ciudad.  A simple viste, Barcelona puede parecer una ciudad enorme, de edificios simples, gigantes y a veces toscos. Sin embargo, en cada calle puedes llevarte la sorpresa de encontrar un bonito edificio que le da carácter y personalidad al lugar. En primer lugar, se pueden ver las casas de Gaudí, que están dispersadas por la ciudad. Las principales son la casa Milá (La Pedrera) y la casa Batlló, en pleno Passeig de Gracia; o la casa Vicens, al norte de este mismo paseo (Carrer de les Carolines, 18). La recomendación para verlos es hacerlo desde fuera, ya que el precio es desorbitado, sobre todo en la casa Batlló. Es mejor ahorrarse el dinero para entrar en la Sagrada Familia, aunque a esta obra maestra es mejor dedicarle una mañana entera. Después se puede volver a la Rambla y ver elPalau Güell en Carrer Nou de la Rambla, 3 (entrar es gratis, porque te dejan ver muy poco) o las originales farolas que diseñó el arquitecto de la naturaleza  (p.e. Plaza Reial). Por la tarde, pueden pasear por el barrio Gótico, conocer latorre Agbar o otra cosa muy importante: el Arco del Triunfo, que puede llegar a sorprender (Passeig de Lluís Companys). Al final del paseo donde se encuentra el Arco del Triunfo, está el parque de la Ciudatela, bastante agradable y curioso para conocer.

Día 3:

La mañana entera la puedes dedicar a ver la Sagrada Familia, tanto por fuera como por dentro (12 euros). Es interesante comparar la puerta del Nacimiento (de Gaudí), por donde sólo entran los grupos, con la puerta de la Pasión (de Subirachs), utilizada como entrada principal; ambas con estilos muy diferentes, sobre todo las esculturas, ya que en el diseño de la portada se ha intentado respetar el boceto original de Gaudí. Por dentro, se puede observar el avanzado estado de la construcción, concebido por Gaudí como un bosque, en el que las columnas simulan ser árboles. A las torres sólo se puede subir en ascensor, por el precio de 2 euros; aunque interesa más subir por la parte trasera, ya que hay menos cola.

Después de esto se puede dedicar la tarde a ver el Parque Güell, en el que llama la atención la entrada y el balcón que se encuentra justo encima de ésta, aunque también es curioso pasear por el parque para ver los acueductos y la casa donde residió Gaudí.

Si os sobra tiempo pueden volver al centro para ver las interminables iglesias que se dispersan por las cercanías del barrio gótico, como la iglesia de Santa María del Mar.

Día 4:

Una opción para terminar la visita de Barcelona es Montjuic. La subida en funicular entra dentro del billete de metro, por lo que es más económico que subir en teleférico. Allí podemos encontrar diferentes parques, el castillo(gratuito) en el que se pueden ver unas vistas maravillosas de la ciudad, el Palau Sant Jordi o el Estadio Olímpico. Bajando por la montaña se encuentra el Museo Nacional de Arte de Cataluña, muy caro pero con exposiciones gratuitas e interesantes. Bajando por el museo se llega hasta la plaza de España, donde hay paradas de metro. No hay que perderse tampoco el Camp Nou y el complejo deportivo que tiene el Barcelona en sus alrededores.

Esto es todo, pero el consejo principal es tener cuidado donde te metes porque pueden cobrarte muy caro (hasta por los mapas) y no tener muchas expectativas sobre la ciudad para dejar que ésta te sorprenda por sí misma. Además, otro punto a apreciar es la diversidad, de gente y de estilos. Esto es todo, un saludo y espero que os guste.

Fuente: Wordpress.com